Los trabajadores de la tradicional confitería “Boston” de Mar del Plata, que realizaban desde ayer un cese de actividades por la falta del pago de salarios, abrieron hoy las puertas de las cuatro sucursales tras la conciliación obligatoria dictada anoche por el Ministerio de Trabajo bonaerense.
La secretaria adjunta de los gastronómicos, Nancy Todoroff, expresó que “la conciliación dictada por el ministerio será por 15 días, por lo que en dicho periodo se buscara solucionar el conflicto que se mantiene hace rato con la empresa”.
“En la jornada de mañana, los empresarios están citados en el ministerio para mantener una reunión con los delegados del organismo provincial de esta ciudad”, añadió.
“Creemos que el grupo de la firma austriaca que en el 2016 compró la Boston, busco en forma intencional que llegaremos a este punto”, indicó la sindicalista.
Puso como por ejemplo la actitud empresaria de “pagar los sueldos a destiempo, no hacer los aportes correspondientes, la falta de materia prima para elaborar los productos o la no reposición de elementos básicos para que los empleados lleven a cabo el trabajo, como atender como corresponde a cada cliente que llega a la confitería”.
“Esperemos que la firma recapacite y le pague a los trabajadores sus sueldos, acá no estamos reclamando aumentos ni sentarnos a discutir paritarias, solo que le paguen los sueldos que tienen atrasados con los trabajadores. Ellos necesitan el dinero para vivir, pedimos que regularicen su situación”, sentenció Todoroff.
De los 130 trabajadores que integran el plantel de las cuatro sucursales de la confitería La Boston, algunos pertenecen al gremio de pasteleros y otros a gastronómicos. Ambos sindicato también esperan cobrar lo que se les adeuda por aporte de sus afiliados.
Con la Unión de Trabajadores Gastronómicos (Uthgra) la empresa tiene una deuda de aportes gremiales y de obra social que supera el millón y medio de pesos.
Con la obra social del sindicato de pasteleros la deuda asciende a más de 2 millones de pesos.
