Un nuevo caso de inseguridad se produjo el pasado jueves en inmediaciones al barrio Centenario. Precisamente en la puerta de una vivienda ubicada en Los Andes y Saavedra, allí Miguel chofer de un taxi, fue interceptado por dos motochorros, que a punta de pistola, le exigieron que les entregue los elementos de valor y luego de hacerlo los malvivientes le gatillaron en la cabeza pero el arma no funcionó.
Isabel la esposa del taxista, le comentó a Brisas que no quiso dar el caso a conocer por miedo a que los hampones tomen represalias contra su familia ya que supone que los sujetos vivirían dentro del barrio Centenario, a unas pocas cuadras del lugar de los hechos.
Una vez que le gatillaron a Miguel, de 61 años y con dos hijas de 7 y 11, después de otorgarles los elementos de valor que llevaba consigo, comenzó a sentirse mal del estómago y lo auxilió una vecina, comentó su mujer.
“El mismo jueves que le pasó esto lo traslado a la guardia del hospital, porque sufrió un pico de 24 de presión, ya que él es hipertenso y el gatillo en la cabeza fue el detonante. El viernes lo operaron de un coágulo y está en coma farmacológico”, aclaró Isabel.
Según los médicos del HIGA el problema del paciente no es su corazón ya que funciona perfectamente sino el coágulo por el que deberá ser tratado en estas horas.
La esposa del taxista desconsolada concluyó: “lo único que queda es dejarlo en coma inducido y mañana ver si le reducen los medicamentos y ver que secuelas pueden quedar. Estoy prendiendo velas a todos los santos para que esto salga bien”.
