Hoy habrá una reunión ante la delegación local en el marco de la conciliación obligatoria. La automotriz que administra la planta tandilense aceptó la presentación de alternativas, por lo que recepcionará el proyecto para retomar la actividad en la planta bajo otro perfil productivo. “La decisión final la tiene Renault”, dijo el director de Industria del Municipio, Mauricio Madarieta.
Tras las reuniones que se concretaron este lunes como resultado de las gestiones en la Nación, el conflicto por el cierre de Metalúrgica Tandil que decretó Renault tendrá una nueva instancia de discusión en el ámbito de la delegación del Ministerio de Trabajo, en el marco de la conciliación obligatoria que dictó días atrás.
La audiencia resultará clave, dadas las últimas derivaciones que tuvo el caso. En concreto, este lunes, con el Municipio como intermediario, integrantes del equipo del programa de Transformación Productiva del Ministerio de Producción y Trabajo nacional llegó a Tandil para mantener encuentros con la UOM y la gerencia de la empresa local.
Por la tarde, se desarrolló otra reunión que sumó nuevos actores a la discusión en un nuevo intento por revertir la decisión de la automotriz y sostener la fuente de empleo de la que dependen alrededor de 160 personas.
Allí, tal como se informó en estas páginas, se presentó un proyecto para continuar con la actividad en la fábrica a partir de un nuevo enfoque estratégico que abarque nuevos mercados.
Desde esta perspectiva, que es acreditada por tres exgerentes de la emblemática fábrica, se considera que la firma puede ser competitiva si se buscan otros mercados (minería, petróleo, agro), manteniendo la capacidad instalada y la fuente laboral.
Recepción de la carpeta
En diálogo con El Eco Multimedios, el director de Industria, Comercio, Servicios y Emprendedores de la Secretaría de Desarrollo Económico Local, Mauricio Madarieta, abordó la problemática y amplió detalles de los encuentros que se celebraron este lunes por la tarde en las oficinas de la dependencia comunal junto a los técnicos de Nación.
Además consideró que la instancia en la delegación de la cartera laboral, a cargo de Blas Pugliese, permitirá sostener el diálogo entre las partes mientras se extienda la conciliación, y será fundamental para adoptar las estrategias necesarias para torcer la voluntad de Renault, que se mostró abierta a la recepción del proyecto para la planta de Figueroa al 500.
Una fábrica “inviable”
Al referirse a los encuentros de los que formó parte, Madarieta dijo que la primera parte se celebró con la presencia del gerente de Metalúrgica Tandil, Gabriel Raffa, que planteó la situación actual de la empresa y “nos dio un panorama respecto a los números”, que demuestran que la continuidad resulta “inviable” para la automotriz francesa.
Además abordaron el tema edilicio, qué pasaría con las instalaciones y el denominado pasivo ambiental y las maquinarias, que serán valuadas y puestas a disposición en el grupo empresario para determinar si existe posibilidad de compra.
Expectativa
Luego de la primera reunión, se propició otro espacio en la Municipalidad para el intercambio que sumó a tres exgerentes de Metalúrgica, Enrique Lalloz, Miguel Cicimarra y Carlos Etcheverri, interesados en tomar las riendas de la emblemática fábrica.
En conjunto con la UOM presentaron una alternativa que será evaluada también por el Ejecutivo. Sin embargo, serán los directivos de Renault los que tendrán la última palabra, pese a que los impulsores entienden que será clave la intervención estatal. “Cualquier cosa que suceda, la decisión política tiene que ser a nivel nacional, de respaldo”, reflejó, ya que, el tema energético, solo por citar una variable, atenta contra la actividad del sector dado el cuadro tarifario actual.
De cualquier modo los impulsores de la iniciativa “tienen claro que la industria automotriz no es la misma que hace diez o quince años”, deslizó, pero también se respaldan en los balances positivos que arrojó la empresa hasta 2007, año en que se desvincularon.
Con un contexto distinto, será necesario también salir en busca de otros mercados que otorguen un cambio estratégico para el desarrollo de nuevos productos con la capacidad instalada, con el acompañamiento de una inversión. “Si bien hablamos de una Metalúrgica sin Renault, sería un desprendimiento gradual”, aclaró el funcionario.
“La decisión final la tiene Renault”, ratificó y agregó que “saben que para tomar una decisión que pueda revertir esto tienen hay que llegar a estos niveles. Nosotros somos transmisores y conductores de estas ideas y así lo vamos a hacer. Hay que pelearla entre todos”.
Fuente: el Eco
