El suceso del verano marplatense, ahora regresa en vacaciones de invierno para seguir compartiendo sus “Dichos y Hechos”. El Gato Peters con su perorata criolla y relatos de los personajes de la pampa gringa, logró convertirse en uno de los referentes indiscutidos del humor nacional con su estilo particular y personal. Y así lo demuestra también el premio Carlos 2014 y la última nominación a los Premios Estrella de Mar como “Mejor unipersonal”.
La actualidad se hace presente en sus monólogos como uno de los más recientes, “Empapados”, dedicado al Papa Francisco. El Gato también analiza con ingenio la nueva inmigración oriental y desde la visión de un bonaerense describe postales de Córdoba (la de los festivales, la del turismo, la de los cuartetos, la de los gringos laboriosos, incluido un análisis delirante de “El burrito cordobés”). Peters, desgrana algunas décimas en su “Milonga campera” y termina sentado en un bidet ajeno (una odisea acuática de final caliente) que arranca risas y lágrimas de todos los espectadores.
Cada espectáculo del Gato Peters es una invitación a reencontrarse con esas historias marcadas por la importante brecha entre el antes y el ahora; las diferencias de paisaje entre la ciudad y el campo y siempre con el humor sencillo, pero a la vez sutil e inteligente al que nos tiene acostumbrados.
“Soy un narrador de costumbres con humor”, se define él mismo sobre su estilo de comicidad que lo lleva a recorrer ciudades, pueblos y caminos para presentar sus espectáculos y, a su vez, para nutrirse de historias verídicas sobre ese modo de vivir que tiene el interior argentino.
Divertidos cuentos que dejan al descubierto la importante brecha entre el antes y el ahora, las diferencias de paisaje entre la ciudad y el campo, pero siempre con el humor sencillo y a la vez sutil e inteligente al que el Gato nos tiene acostumbrados.
