Tras un mal arranque, Quilmes corrigió todos sus defectos y logró un importante triunfo, 70-87, sobre Ciclista Juninense, en su primera excursión a Junín (el jueves enfrentará a Argentino en esa misma localidad), sumando así su segunda victoria fuera de casa, la primera fue en el inicio de esta temporada cuando en el Polideportivo había derrotado en esa condición a Peñarol.
Esta vez el goleo en el “tricolor” estuvo repartido sobresaliendo los 19 puntos de Walter Baxley y los 16 de Luis Cequeira y Luca Vildoza. Mientras que en el local no alcanzaron los 24 puntos del pivote extranjero Price.
El dueño de casa impuso sus condiciones en el inicio del partido, mucha presión en defensa y transiciones rápidas hacia el ataque que le permitían adueñarse del marcador, llegando a sacar una luz de 11 puntos, 23-12, sin embargo el tricolor supo reaccionar y le propino un parcial de 2-12, con una gran tarea del “Colo” Wolkowysky, quien contra la chicharra clavo un triple para que al cabo de los primeros diez minutos Quilmes tan solo cayera por un doble, 25-23.
La mejora mostrada por el conjunto marplatense, se confirmó en el segundo cuarto con un Wolkowysky que mostraba su categoría, sumado a una mejora en todas sus líneas, con un cambio táctico que le dio sus réditos al poner triple base con Cequeira, Vildoza y Sansimoni, y dos hombres grandes, Gallizi y el “Colo”, neutralizando el vértigo impuesto por Ciclista en el inicio del juego, estirando la ventaja a 11 puntos, 34-45, al cabo de la primera etapa.
Al regreso de las acciones, el “Tricolor” siguió solido en defensa y efectivo en ataque, con un buen pasaje de los extranjeros Baxley y Clark, controlando la ventaja obtenida ante un rival que no hallaba la forma de doblegar la maraña defensiva planteada por los de Ramella, entrando al cuarto decisivo con una renta de 12 puntos, 52-64.
Los de Pagura apostaron a una marcación cajón y uno sobre Walter Baxley, con la intención de anular al americano, clave en el “Tricolor”, pero los marplatenses seguían encontrando otras vías de gol, a pesar de perder por faltas a Tayavek Gallizi, que venía haciendo un buen partido, pero que estaba condicionado desde el arranque del juego cuando le cobraron sus dos primeras faltas. Esta vez Quilmes no vaciló, ni tuvo baches, asegurando su primer triunfo en la ruta y su segundo en condición de visitante (ganó el primer clásico en esa condición a Peñarol), por 17 puntos, 70-87.
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