Un grupo de obreros reclamó desde el jueves pasado el pago de una garantía salarial semanal frente a Frigorífico Bermejo, en Irala y Bermejo, donde bloqueó el portón de acceso y encendió gomas a la espera de una respuesta que todavía no llegó.
Los manifestantes forman parte de un grupo de más de 50 trabajadores entre peones, envasadoras, calibradoras, fileteros y camaristas. Pertenecen a Cooperativa El Tigre, que hace más de una década funciona como un satélite de Bermejo, el frigorífico que pertenece a José María Poletti.
Los obreros de El Tigre procesan merluza en una planta ubicada frente a la sala sanitaria de Guanahani, pero se manifiestan y reclaman en el frigorífico dador de materia prima.
El sol matinal le confiere mayor luminosidad a la protesta. Como una pátina que enaltece la dignidad de los trabajadores precarizados. Junto a sus ansiedades, troncos de leña para alimentar una parrilla rudimentaria donde calientan agua para el mate; una pila de gomas más sobre la vereda para alimentar el fuego tóxico que enrarece el aire varios metros a la redonda.
Un grupo sentado en reposeras, otros sobre la vereda, con la espalda en la pared del frigorífico, contando las horas que parecen ir más rápido con la ayuda de la pantalla del celular. Bicicletas y alguna motito, a pocos metros, vigilada.
“Somos 50 compañeros que solo quieren mantener la fuente de trabajo y cobrar un garantizado de 2500 pesos semanales para mantener a nuestras familias”, contó uno de los manifestantes de buzo rojo.
Los trabajadores explicaron que a principios de año Poletti dejó de mandarles pescado y fue Walter Santa Catarina quien continuó aportando materia prima. “Pero desde el mes pasado no manda más porque dice que se le cayeron las ventas del mercado interno”, agregó otro filetero.
“El que avisa no traiciona”, dice Poletti cuando REVISTA PUERTO quiere saber cómo se desencadenó el conflicto con los trabajadores. “Me he reunido con todos los funcionarios que he podido, desde la gobernadora Vidal hasta el ministro de Trabajo, Villegas. Tomás Gerpe y sus colaboradores. A todos les pedí por el crédito que tengo pendiente. Esto es consecuencia de esa falta de respuestas”, subrayó el empresario.
Santa Catarina ofreció una indemnización por los seis meses que entregó pescado a El Tigre pero la oferta fue desechada por los trabajadores, que fueron a reclamar a Frigorífico Bermejo. “Les ofrecí entregarles 500 cajones de pescado por semana para que vayan tirando hasta que la cosa se reactive, pero también lo rechazaron. No tengo plata para pagar las indemnizaciones. Estoy fundido”, aseguró Poletti.
Los trabajadores rechazaron también la sugerencia de dirigentes del SOIP, quienes les recomendaron aceptar los 500 cajones de garantía semanal que proponía Poletti. “Para pagar el garantizado que ellos piden tengo que mandarles más de mil cajones de merluza, y la verdad no tengo cómo comprarlos, pero si pudiera, me sigo fundiendo porque nadie vende, está todo parado”, reportó el empresario.
Roberto Garrone
Revista Puerto
Vamos compas !!! Firme junto a ustedes !!!