Hasta el hartazgo argumentamos todos los días que la inseguridad es un problema de todos. Es muy difícil saber cuando, pero si sabemos que algún día nos va a tocar. Muchos de los atracos que se llevan a cabo en nuestro medio son “al voleo” como se los denomina en la jerga policial. Pero otros requieren una investigación previa que los hace aún más peligrosos ya que los delincuentes saben absolutamente todo lo que trasladas en ese momento.
Un caso similar sucedió anoche en la intersección de Luro y 206, cuando un trabajador de la UTE El Libertador fue interceptado por dos hampones armados, que no solo se llevaron el vehículo en el que se transportaba la victima sino que además le secuestraron 65 mil pesos que había recaudado durante la jornada.
El cobrador de 46 años bajó de su automóvil y se dirigía hacia uno de los comercios donde debía recolectar parte de la caja. En ese momento dos maleantes encañonaron al empleado de la UTE y se fugaron en el Volkswagen Gol del damnificado. Rodado que abandonaron pocas cuadras después para abordar una camioneta marca Peugeot Partner que fue seguida por personal policial de la comisaría Sexta pero no pudo darle alcance.
La persecución no tuvo el éxito esperado ya que los malvivientes huyeron sin dejar rastros importantes solo huellas en el rodado secuestrado. El cobrador declaró que los facinerosos llevaron adelante su accionar a cara descubierta.
