La Defensoría del Pueblo emitió una Resolución mediante la cual expresa al Departamento Ejecutivo municipal su preocupación por el riesgo que genera a las personas el mal estado de mantenimiento de numerosas veredas, o directamente la falta de construcción de las mismas, poniendo en riesgo la vida e integridad física de los peatones, y obstaculizando la accesibilidad, circulación y transitabilidad.
Asimismo recomienda la implementación de acciones tendientes a lograr la construcción, reconstrucción y reparación de veredas para generar mayor seguridad en el tránsito peatonal y mejorar las condiciones estéticas, funcionales y de accesibilidad en el Partido de General Pueyrredón mediante la realización de los controles por parte de la dependencia respectiva, del cumplimiento del Reglamento General de Construcciones y la colaboración con aquellos frentistas a los que les resulta dificultoso acceder a su cumplimiento.
El Defensor del Pueblo Fernando Rizzi explicó que “la construcción y mantenimiento en condiciones de las veredas constituyen un factor determinante para la adecuada movilidad, accesibilidad y transitabilidad por parte de los todos los habitantes a los fines de garantizar principalmente la seguridad personal y la normal comunicación. En los diversos sectores de la ciudad se observa ausencia de veredas reglamentarias cuya construcción está a cargo del frentista, como así también la evidente falta de mantenimiento de muchas de las ya existentes”.
“Es motivo de frecuente queja por parte de los vecinos, la dificultad para transitar en forma segura. Son numerosos los casos de caídas, accidentes y daños físicos de gravedad sufridos por personas que se han caído y lastimado a raíz de las veredas intransitables” expresó Walter Rodríguez, otro de los Defensores.
El Municipio y el propietario frentista constituyen los “guardianes” de las veredas (entendiendo como “guardián” aquel que posee la facultad de control, dirección, custodia o vigilancia sobre la cosa), pero es este último el que está obligado al mantenimiento de la acera, conforme establece el Reglamento General de Construcciones (Ordenanza N° 6997).
El art. 3.2.12. del Reglamento General de Construcciones establece que “Todo propietario está obligado a adecuar sus propiedades a las modalidades, condiciones y características que se establecen en el presente reglamento, debiendo mantener los cercos y aceras en buen estado de conservación”, para luego disponer en el mismo artículo que “En caso de incumplimiento con lo dispuesto en el presente reglamento o cuando razones de urgencia así lo aconsejaren, el Departamento Ejecutivo podrá proceder en forma directa o por contratación a la realización de los trabajos que sean necesarios, por cuenta y cargo de quien resultare responsable…”.
“Atento el estado de deterioro evidente de un gran porcentaje de las veredas del Municipio resulta necesario implementar un plan integral para impulsar la construcción y reparación de las mismas, y fundamentalmente, tener presente las circunstancias de aquellos que por diversos motivos de índole económica se encuentran imposibilitados de cumplir con las tareas encomendadas. Asimismo, es sabido que las tareas descriptas, generarán mano de obra a cientos de trabajadores marplatenses en forma directa e indirecta” agregó el otro de los Defensores, Fernando Cuesta.
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