Comenzarán a sancionar a quienes tiren agua en la vía pública

El intendente Gustavo Pulti, acompañado por el titular de Obras Sanitarias Sociedad de Estado (OSSE), Mario Del Ollio, el presidente del Ente Municipal de Vialidad y Alumbrado (EMVIAL), José María Conte, y el subsecretario de Gobierno, Pablo García, mantuvo una reunión este jueves por la tarde con los jueces de faltas Ana Castelao, José Luis Oteiza, Pedro López Martucci y Fernando Mumare.

Durante el encuentro, trabajaron en el cumplimiento de las ordenanzas vigentes respecto de los volcamientos de agua a la vía pública que se dan en diferentes puntos de la ciudad y provocan un gran deterioro en el pavimento.

En este sentido, Mario del Ollio manifestó que “la ordenanza, que establece un régimen de sanciones, fue aprobada en diciembre. A partir de ese momento comenzó una etapa de sensibilización y concientización durante la cual, OSSE ha estado notificando a infractores, haciendo inspecciones, y trabajando en los lugares donde se producen volcamientos sin aplicar ningún tipo de multas”.

“No obstante, se ha detectado un gran nivel de reincidencia en la generación de este tipo de escurrimientos que deterioran los pavimentos y que, además, significan un uso dispendioso del recurso. Por eso, es que se va a poner en marcha el régimen sancionatorio”, dijo.

“Con los jueces, trabajamos en los circuitos de administración de la detección de la infracción, la elaboración del acta, y la fluidez de ese procedimiento en el juzgado de faltas ya que el juzgado va a empezar a priorizar la sanción pecuniaria de esta infracción con incrementos de costos importantes para los reincidentes”, explicó.

Luego, explicó que “los volcamientos se dan en diferentes puntos de la ciudad y suelen ser producto de la actividad de hoteles, comercios, restoranes, casas de familia con pileta, y de actividades industriales clandestinas que vuelcan agua a la vía pública”.

Por su parte, el titular del EMVIAL sostuvo que “el tema pasa porque todos tengamos conciencia de que no es gratis arrojar agua a la vía pública dado que esto provoca un perjuicio a toda la comunidad. Es que la rotura de pavimentos, luego, la pagamos entre todos”.