Arroyo ya sufre el choque de los planetas  

Ya no están alineados como en su apogeo y comenzó la fase del perigeo, están fuera de órbita. La “Patoruzada” venía saliendo bien, hasta que le dieron para beber de su propia medicina. Salvaron la ropa quedando sexto y octavo. Hasta ahí llegó la chirinada, que alcanzó su cenit hace poco menos de 2 años, cuando puso a sus pies a la opaca política lugareña. Una elemental y unipersonal organización política, barrió la mesa y se llevó todas las apuestas, en aquel entonces. Si alguien definió al futbol como la dinámica de lo impensado, la política no le va en zaga.

Luego de las 02.45 (PM)  del último sábado cuando había que cerrar las listas, se habían agotado los tiempos, la cosa se puso espesa y no se dejaron de correr el arco. El yerno (por Loria) y el secretario del HCD (por Tonto), fueron a parar más allá de la mitad de la grilla. Decía en ese momento nuestro link Conmoción en CAMBIEMOS: Arroyo desconoce lista única que impulsó Vidal que existía una suerte de sublevación, por los lugares en la lista, en abierto desafío a los deseos de la gobernadora.

Le doblaron la apuesta y se derrumbaron sus acciones. Y lo que es peor, el piano no terminó de caer para Agrupación Atlántica. De alguna manera, el PRO terminaba con esta atípica aventura muy bien vendida para las PASO 2015, cuando el batacazo fue sonoro, pero nunca dejó de ser un vientre político alquilado. Ahora van por la criatura, en esta moderna concepción de construir montajes propios.

Para el intendente Arroyo, el triunfo fue siempre de él, sólo de él, mío y sólo mío. Pero de pronto le cambiaron las reglas del juego y le marcaron la cancha. Mauricio Loria y Juan Ignacio Tonto, sus pupilos muy difícilmente presten juramento y ocupen sus bancas, es muy simple para entrar tienen que sacar el 50 % de los votos, 6 de una renovación de 12 concejales. Es un reflejo de la primera modificación que la política le asesta institucionalmente al intendente, dentro de su propia alianza lo cual no es un dato menor, y un agravante por cierto.

El hombre de confianza del intendente municipal “es infumable” en La Plata. La gobernadora hizo hasta terapia política con la familia en pleno, para sacar algo en limpio, pero debió rendirse. Se forzó la situación hasta que quedó al desnudo que la situación no daba para más. Y el repliegue es como en las estepas rusas cubiertas de nieve. Si lo prefieren en término bélicos, no comenzó la guerra y ya cayeron soldados.

Su mesa chica ha pasado a ser minúscula y si la lectura no es correcta, el proceso puede ser más traumático aún. No es la oposición ni una operación ni el multimedios, es el paso previo a una rendición sin concesiones y el mandato expira en el 2019, 2 años y medio (30 meses), es una enormidad. Y en buen romance, ya se lanzó la pelea para sucederlo, lo del “Pato rengo” puede ser una nimiedad, pero así es la política. Los avatares hasta octubre irán marcando el rumbo, pero ya hay preparativos para ese mes en especial, sólo hay que aguardar los resultados de las legislativas, para saber cómo y en quién queda el manejo del poder. No seguir el protocolo tiene sus consecuencias, pero el manual existe para este tipo de contingencias extremas.

El optimismo de CAMBIEMOS es el peronismo extraviado

Hubo actores trascendentes, de los que operan en las sombras, corren maratones y hacen bicicleteadas  por la costa junto a Manino Iriart, por ejemplo, o que lo suben a comitivas de diputados provinciales al legislador de Scioli, destinos internacionales para que conozca mejor cómo funcionan  las reglas para combatir el hampa y luego graban autovideos con el relato de la falta de patrulleros en la costa marplatense.

La maquinaria familiar política sin antecedentes ha tocado a su fin. Es más hay una movilización interna que tiene ya fijado el objetivo para octubre, para operar sin anestesia, cirugía mayor. La movida no es tan monolítica y conmueve los cimientos internos de CAMBIEMOS. Se ha comenzado a jugar otro partido y la Coalición debía dar señales de carácter, para que no se los lleve a todos puestos. Hay coincidencias pero también divergencias, unas tan profundas como otras. Pero llegó la hora de la acción. Con el último desencanto de Salvai llegó el réquiem para Loria. Ese fue el minuto uno del inicio de la cuenta regresiva, pero ya los tenían contra su propio arco, casi fue en defensa propia, cuando se dieron cuenta que el enfermo no tiene cura.

El plan PRO para Mar del Plata: Vidal, metrobus y suerte

¿Puede un cierre de listas adelantar los tiempos? En una ciudad de las características de Mar del Plata, definitivamente: Si.  Las cartas están sobre la mesa. Esta especie de fulleros que participa permiten aventurar todo y mucho más. Los hay en el oficialismo y en la oposición. Con las instancias consumadas, doblan sus apuestas con una regla de oro: todo debe ser en beneficio propio. El PRO (y por ahora) sólo respeta a Elisa Carrió, pero que se prepare para cuando se le acaben los ases. Es muy simple, arrancaron con su cuna en la Capital Federal, bloquearon a Losteau para unas PASO, dominan la Nación y la Provincia. En plazos ínfimos y aprovechando la urgencia de los argentinos para sacarse de encima al kirchnerismo. Ahora se acabó la transa con Arroyo, y si lo hicieron saber, lo único que puede hacer el intendente es minimizar los daños. Pero tampoco se sabe cuál es su resto, con lo cual no hay que descartar nada en la transición.

Este rompecabezas algebraico, necesita de entendedores, saberse nutrido de información interior, para manejarse con propiedad. Saben que están aprendiendo y pagan los costos políticos necesarios. No es real lo de la nueva y la vieja política, la política es buena o mala. Las elecciones no se ganan sino que se pierden. Y en eso están, ni más ni menos, no pueden perder lo que tampoco los convierte en ganadores. Que los reflejos fueron lentos, puede ser, las advertencias no faltaron sino que fueron apabullantes. La recomposición necesita otro tipo de jugadores, pero la gente quiere verlos en la cancha. En las PASO de agosto habrá una mesa examinadora, y la apuesta máxima es pasar raspando. Son 60 días, plazo exiguo si los hay, para revertir una tendencia. Ya no hay más lugar para improvisaciones y equivocaciones. En octubre ya viviremos una primavera avanzada, de acuerdo al calendario,  o continuaremos en invierno según la sensación de la gente. Y no es precisamente una cuestión térmica, la referencia como alusión.

El reglamento es más o menos el mismo que en toda la provincia, o en toda la Nación, si se prefiere ser más abarcador. Todos arrastran sus propias miserias. Los restos del P.J., el kirchnerismo, “Massita”, Randazo,  Acción Marplatense, están todos más o menos en lo mismo. La situación económica, social, laboral y la inseguridad, no han dado tregua. Acertar con el mensaje, con el discurso, con las señales, es de máximo rigor, hay que ir voto por voto. Llegó la hora de poner toda la carne en el asador. No hay lugar para la falta de compromiso ni para los trémulos. Este es el partido que se ha planteado, es el desafío de estas horas, todo lo demás es cartón pintado.

Jorge Elías Gómez

mdphoy.com