En su debut como local, Alvarado tuvo el total dominio del partido, intentó por todas las vías y sólo le faltó el gol. Por eso, se fue con el sabor amargo del José María Minella, mientras que Deportivo Madryn festejó el 0 a 0 por la segunda fecha del Nonagonal Sur del Torneo Federal A. Un claro penal sobre Gabriel Compagnucci que no sancionó Fernández a poco del final, pudo haber cambiado la historia.En un primer tiempo pobre, Alvarado hizo el gasto y Deportivo Madryn su negocio. El conjunto sureño vino con la única misión de mantener el arco en cero y cerró las líneas, complicó el circuito marplatense, le quitó espacios a los desequilibrantes hombres de las bandas y obligó a tirar centros que se encargaron de desactivar los centrales aurinegros. El “torito” buscó por todas las vías, jugó casi los 45′ en campo rival, movió la pelota de un lado al otro buscando por dónde entrar y trató de no desesperarse.
Pero por momentos, era inevitable buscar por otra vía y, la más sencilla, era buscar la cabeza de Albarracín y Susvielles. Sobre todo cuando Molina y Compagnucci lograban llegar al fondo por los costados o las trepadas de Corti y Santos terminaban con muchos hombres dentro del área. Juan Gáspari era el abanderado en la presión, la recuperación y aparecía por todos los sectores. Para tirar un centro desde la derecha o cortar con lo justo un ataque casi sobre el córner izquierdo de su defensa. La falta de gestación y la poca participación en los últimos metros, fue la principal falencia del conjunto de Gustavo Noto que no pudo generar ninguna situación de gol neta en toda la etapa.
En el complemento a la posesión le sumó algo más de profundidad y ahí sí fue dueño absoluto de las acciones, atacando de todas las maneras posibles y llevando riesgo al arco de Leguiza, sin convertirlo en figura pero sí inquietando permanentemente. Un córner de Damián Luengo, en una jugada preparada, no pudo ser empujado por Albarracín por centímetros. El exUnión tuvo una más tras asistencia de Susvielles, pero el puntazo se perdió apenas arriba.
Todo pasaba en campo de Madryn y las jugadas se empezaron a acumular. Un buen desborde de Compagnucci terminó con Molina pivoteando y Luengo rematando apenas alto; Susvielles no pudo llegar por poco ante el achique de Leguiza; Verón intentó con un buen derechazo que se desvió; y Molina, de lejos, la tiró por encima del travesaño. La polémica de la noche quedó para el cierre, cuando Mansilla le cometió un claro penal a Compagnucci, lo agarró de la camiseta y lo derribó, ante la pasividad del árbitro que, encima, amonestó al volante derecho que había ganado por su sector.
Empate con sabor a poco para el conjunto de Gustavo Noto, que no pudo lograr lo que se propuso, pero nuevamente dio muestras de ser protagonista, los rivales lo respetan mucho y lo ven como candidato. Por eso, se refugian en el Minella, vienen a buscar el punto y, a veces, como hoy a Deportivo Madryn, le sale bien.
Fotos: Florencia Arroyos/Prensa Alvarado
